Hola, ante todo quería pedir disculpas a Salome ya que le eché una bronca enorme por algo en lo que ella no tenía nada que ver.
Resulta que la llamé al volver de nuestro viaje de novios hecha una furia porque el sonido de la ceremonia fue penoso. Poco me faltó para casi insultarla. Por favor, perdóname. Al final, la que estaba equivocada era yo. El sonido lo ponía el restaurante y Salome no tenía nada que ver con la poca calidad del mismo. Ella se limitó a llevar la música que habíamos elegido y no podía obligar al restaurante a usar otros equipos, los suyos, de mejor calidad.
Te vuelvo a pedir disculpas y agradecerte a tí y a Bodas Tosca todo vuestro trabajo.
Gracias.
Joseph y Paula.